Un juez con jurisdicción nacional en Criminalidad Organizada y Corrupción dictó este martes auto de formal procesamiento y prisión preventiva contra cuatro agentes de la Policía Nacional, acusados por extorsión contra un ciudadano, por lo que fueron remitidos a la Penitenciaría Nacional localizada en la aldea de Támara al norte de la capital hondureña.
Los policías acusados, identificados como Kenneth Esaú Varela, Emerson Aldair Vindel, Emerson Flores y Erick Omar Andino, son señalados como presuntos responsables de extorsión, privación injusta de la libertad y asociación para delinquir.
Según la portavoz de los juzgados de Tegucigalpa, Bárbara Castillo, los hechos ocurrieron el pasado 12 de agosto, cuando los policías interceptaron a la víctima, la privaron de su libertad y exigieron una suma de dinero a cambio de liberarla.
Inicialmente, los agentes solicitaron 50,000 lempiras, pero posteriormente redujeron la cantidad a ten,000 lempiras, que acordaron entregar en las inmediaciones de colonia La Cañada, en Tegucigalpa.
Es así que el 13 de agosto, los policías fueron capturados en flagrancia por otros miembros de la Policía Nacional, quienes los detuvieron con evidencia del delito.
Traslado a prisión
Tras la audiencia, los cuatro acusados fueron remitidos al centro penitenciario localizado en el valle de Támara, Francisco Morazán, donde permanecerán bajo prisión preventiva mientras continúa el proceso judicial.
La captura en flagrancia
De acuerdo con el Ministerio Público (MP), la Agencia Técnica de Investigación Legal (ATIC) fue clave en la captura de dos de los acusados, quienes fueron sorprendidos en flagrancia mientras cometían el delito de cohecho propio.
Estos policías presuntamente detuvieron ilegalmente a un ciudadano en un restaurante de comida rápida y lo obligaron a retirar 10,000 lempiras de un cajero automático.